Re-lectura de una obra de Pancetti, por Fábyo Só |
Alumno: Fábio Dos Santos
Revisora: Mariela
Bier Teixeira
Yo
me llamo Fábio Dos Santos, tengo cuarenta años y soy flaco. Mucha gente que no
me conoce piensa que tengo algún tipo de enfermedad, pero, en realidad lo que
pasa es que nunca estuve tan bien en toda mi vida. Me aburren, pero, he
aprendido hacerme el distraído y no llevar tan en serio lo que piensa la gente.
Cortés.
Soy con todos. Porque creo que uno tiene que respetar las diferencias que hacen
la personalidad de cada ser humano. Y la cortesía suele ser una fuerte aliada
en este mundo tan lleno de prisas y agresiones sin sentido.
Mis
amigos dicen que soy cariñoso y generoso. Tengo que confesar que tienen razón.
Lo que pasa es que intento serlo con todos para que sean conmigo. Al ser humano
el cariño puede ser una medicina muy eficaz para combatir depresiones,
preocupaciones, inseguridades. Igual con la generosidad. No sé que me pasará
mañana. No sé de cuantas personas dependeré para seguir viviendo con dignidad.
También
sensible para los sentimientos, para el arte, para la charla con mi família o
amigos, sensible en todas las esferas. La sensibilidad puede cambiar las
personas que estén dispuestas a sentirla y a practicarla sin miedos o
prejuicios.
Otra
característica que me pone listo para llevar con éxito todos mis compromisos es
que soy dinámico. Y metódico. Porque no me gusta trabajar o actuar en lo que
sea cuando hay mucha confusión o cuando no se sabe dónde están las cosas que
se necesita para hacer un trabajo cualquier. Así que método y dinámica, para mí
son esenciales para que todo mi potencial pueda aflorar.
La
característica negativa es que soy malhumorado. Principalmente cuando me hacen
estar donde no quiero o cuando no estoy listo para exponer mis sentimientos de
la manera que me piden. Yo ando más despacio. No tengo prisa. Tengo
sentimientos.
Agrego
que soy trabajador, que vivo en un apartamento de estilo “almodovariano” por
que es muy colorido, con tonos de colores fuertes, como en las películas del
genial Pedro Almodóvar. Soy brasileño, pero tengo alma de pampero. A veces
protector, otras llorón, tan simpático como antipático.
Tendría
mucho que hablar de mi, pero, en otra oportunidad. ¿Vale? Gracias y hasta pronto.